Sofrología, ¿nos atrevemos o no?
¿Y si la sofrología pudiera revolucionar nuestra práctica del fitness y el culturismo? Mejora de la motivación y la concentración, control del estrés y mayor confianza en sí mismo, el entrenador hace un balance de los activos de este método suave.
¿Qué es la Sofrología?
Nacido en los años 60, este método se basa en la relajación física y cerebral. Se inspira en técnicas como el yoga, la filosofía Zen o la hipnosis. Gracias a la realización de ejercicios dinámicos de relajación (respiración, visualización de imágenes), el practicante adquiere un mejor control de su cuerpo y una gestión eficaz del estrés. Accesible para todos, independientemente de la edad o del nivel de forma física, la sofrología podría dar un impulso a nuestro rendimiento deportivo (cross training / CrossFit®, aquagym, Pilates) ayudándonos a superarnos y a eliminar los frenos que dificultan nuestro progreso. Es bueno saberlo: muchos campeones deportivos usan esta técnica para alcanzar su nivel de excelencia.
¿Cómo funciona la sofrología?
Al desarrollar el conocimiento y el control de nuestro cuerpo, pero también nuestra capacidad de percibir nuestra posición en el espacio, la sofrología nos permite ganar en precisión. ¡Útil durante una sesión de Pole dance o de Pilates! Otra ventaja, y no la menos importante, es que esta técnica de desarrollo personal ayuda a manejar mejor el esfuerzo al liberarnos de nuestras tensiones musculares mientras que el trabajo en la respiración promueve la oxigenación muscular. Finalmente, en el lado cerebral, la sofrología agudiza la capacidad de concentración, como el yoga o Bodybalance que son parte del aquí y ahora. ¡Una condición sine qua non para deshacerse de los pensamientos parásitos que nos impiden estar realmente centrados en nuestra actividad del momento! Y también: mejora el sueño y puede ayudarnos durante la dieta, para dejar de fumar o en caso de fobia.
La sofrología en la práctica
Generalmente se cuenta una hora para una sesión de sofrología sabiendo que generalmente es necesario practicar varios cursos para lograr resultados convincentes. Complementario a una actividad deportiva (aquagym, cross training, CrossFit®, Pilates…), puede combinarse con clases de fitness orientadas al bienestar (yoga antiestrés, tai chi o Qi-gong) para combinar los efectos beneficiosos. ¿Vamos a intentarlo?
Crédito de la foto: Freepik – Textos: Skom.